PAPEL PRENSA

En la actualidad solo las amebas pueden ser indiferentes a esta discusión.

Después de décadas de dejar hacer, irrumpe una acción política frente al apoderamiento del poder por parte de los medios.

La bisagra histórica es inevitable. O intentamos conducirnos hacia un futuro que incluya a todos los argentinos o quedamos atrapados en el pasado, siempre presente.

Y no hay lugar para los tibios.

Si pretendemos formarnos una opinión sobre Papel Prensa busquemos en los antecedentes escritos con anterioridad al estallido. El dictamen del Dr. Ricardo Molinas a cargo de la Fiscalía Nacional de Investigaciones Administrativas, durante la gestión del Presidente Alfonsín, que ha dado lugar a un libro escrito con su hijo "El Espejo", "El Dictador" de Seoane y Muleiro, los "Cerrojos de la Prensa" de Julio Ramos, que reflejan distintas perspectivas.

Recorramos hemerotecas que haya conservado publicaciones de la época.

Si no se tiene una opinión formada es preferible no leer lo que se escribe en este momento.

La gente como yo, la gente común, debemos mantener el estado de alerta al recibir información y de la duda permanente sobre lo que se lee y escucha; algunas contradicciones son groseras, aunque estén bien escritas o dichas y fáciles de advertir.

La vigencia de la libertad de prensa que existe en la actualidad está demostrada por el debate público del conflicto en todos los Poderes de la República y en todos los estratos sociales.

El gran problema de la prensa y de los medios de difusión en general es en lo que se han convertido.

El bombardeo de noticias repetidas es una técnica para la creación de opinión.

La primera de todas las fuerzas que dirigen al mundo es la mentira (Ravel, Jean F.).

Tratemos de tener una actitud de apertura y de reflexión cuando leemos o escuchamos.

La Nación del 20 de agosto de este año: "Prohibieron a Cablevisión ofrecer acceso a internet", según también dice el diario, el gobierno le imputa haber usupado la licencia de Fibertel.

Hay que enfocar sencillamente el problema. La ley exige que el Estado haya aprobado la licencia, por lo tanto, o se tiene la licencia o no se tiene. Las explicaciones eruditas, excesivas, repetitivas constituyen conocimiento inútil (otra técnica) y su fin es el de confundir.

Pensemos en otras situaciones. No debemos utilizar los productos de Microsoft si no contamos con la licencia. Sabemos que para usar servicios que pertenecen o estan controlados por terceros hemos de aceptar sus términos y condiciones, así, el correo electrónico, los buscadores, internet, cable.

Tan acostumbrados estamos a la apropiación de los bienes que son de todos nosotros bajo la administración del Estado que comprendemos mejor el respeto por los derechos de los particulares.

Algunas preguntas nos ayudan en el proceso reflexión.

La Nación (22-8-10) "El oficialismo vs. los mediso independientes - en busca del control de la provisión de papel" "Prepara el Gobierno una ofensiva contra los diarios" "Acusará a Clarín y a la Nación, principales accionistas de Papel Prensa; pretende anular la compra".

No advierto que la gestión del oficialismo se dirija contro todos los medios de difusión del País, ni siquiera contra todos los diarios, por lo tanto:

¿Para el diario, los únicos medios independientes son Clarín y La Nación?

¿Los únicos diarios del País son Clarín y La Nación ?

¿Quién tiene el control de la provisión de papel actualmente ?

¿ Por qué este control debe tolerarse y respetarse como legítimo ?

¿Por qué no participan todos los medios gráficos de la provisión de papel ?

¿Por qué se excluye a los más de lo que controlan solo dos ?

¿Cuántos medios gráficos han desaparecido desde la constitución de Papel Prensa durante el genocidio?

Más de cincuenta hasta 1993, fecha de la publicación del libro de Ramos.

Papel Prensa aumentó desde 2002 un 420 % el precio del principal insumo gráfico, mientras que el precio de tapa y el del centímetro de publicidad crecieron un 150 %.

Cómo es posible esta oposición política mediocre, miope, traicionera, sin ninguna iniciativa, que no defiende el interés nacional. Tan igual a la que en su momento impidió el programa de desarrollo de Yrigoyen, cuando apoya a los ferroviarios, cuando envía al Congreso el proyecto sobre la nacionalización del petróleo, el de la ley de jubilaciones, oponiéndose sistemáticamente a sus medidas nacionales y populares.

Tal igual a la que asoló a la República después de la caida de Perón en 1955, cuando a la cabeza de intelectuales como Prebisch, se traspasa al capital privado (extranjero) las empresas estatizadas, se eliminan los controles de precios y de cambio y en contra del abastecimiento de la industria nacional con insumos importados, se modifica el sistema bancario con la gravitación de los bancos extranjeros, se anula el crédito industrial, se liquida el I.A.P.I. y se transfieren los transportes y servicios públicos al capital foráneo. El mismo plan de 1930.

Horroroso festival que se repite al rifarse la riqueza nacional durante la década de los 90, con el apoyo sin tapujos de estos medios.

La dirigencia contraria al gobierno en lugar de discutir el proyecto nacional se retuerce espasmódicamente en contra de todas sus decisiones, como las trágicas comparsas, algunas con pretensiones intelectuales, que apoyaron los fusilamientos de argentinos en nombre de la libertad y de la cultura.

"Ahora el cuarto poder existe y yo diría que es el primero, solo que no tiene nada que ver con la libertad de prensa y sí mucho con la libertad de empresa", Jauretche, 1968.